Como os contaba se ha celebrado
un fin de semana de lujo y ahí hemos estado para contaros todos los detalles, el marco a este encuentro ha sido las Bodegas Suau, un entorno que ha contribuido a que la visita fuese amena y relajada.
El primer encuentro fué con el símbolo de lujo
por excelencia: los coches, Mercedes y Bentley me robaron el corazón, simplemente
espectaculares.
En la visita nos guiaron Fernando Castellanos y Araceli Bosch, Consejero Delegado y Resp. De
Prensa de Mallorca Deluxe, quienes nos explicaron el enorme interés que tiene
Mallorca como destino turístico de lujo.
Comenzamos nuestro recorrido en Nicolás Joyero, su máximo responsable Nicolás
Pomar, nos adentró en el mundo de la relojería, concretamente de la firma
Breitling que fabrica relojes para los conductores de Bentley, piezas
impresionantes con detalles que le recuerdan a su poseedor cada vez que ve la
hora a su adorado coche. Estrategia de marca 100%. La pieza de mayor valor era
un reloj en oro de 31.000 euros, una pieza no
apta para bolsillos en crisis.
La encantadora gemóloga Sara
Fañanás de Joyeria Weyler nos explicó que en Weyler se encargan de realizar
piezas únicas para sus clientes, se adaptan totalmente a ellos, realizando
joyas personalizadas, lo que me llamó más la atención fueron los relojes de segunda
mando de alta gama, darle un nuevo destino a esas pizas que se tienen en casa y
que ya no se usan, ya sea modificándolas o poniéndolas a la venta, me pareció
una fantástica opción para consumidores con un bolsillo menos abultado.
La alimentación no podía faltar
en una feria del lujo, ahí estaba Mallorca Delicatessen, productos de la tierra
con ese twist necesario para convertirse en un objeto de deseo, con clientes de
diversos países, estan orgullosos de uno de sus productos estrella: la miel de Flor de Almendro,
una delicia para los sentidos.
Y no puede haber lujo sin un
recinto de paz y descanso y ese sitio perfecto es Castell de Son Claret, un lugar mágico en Es
Capdellà, abierto hace unos meses, es un hermoso castillo que os invito a
descubrir y sobre todo a que disfruteis de su maravilloso spa.
El final de este recorrido fue un
delicioso gin tonic de SUAU y el mejor broche de oro una visita guiada por las
bodegas, pero esa historia es demasiado interesante así que os la contaré la
próxima semana.
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