Evitaba escribir un post sobre la
proclamación y los estilismos de las invitadas. Quería dejar enfriar un poco
mis impresiones. Hay alguien que me ha dicho que estoy instalada en la cuerda
Peñafiel. Pero sinceramente, ante el panorama que he visto,
no puedo evitar lanzarme no a contarlo, sino escribirlo, que para eso esta mi blog.
En líneas generales las invitadas acertaron en su elección
de look para el día, aunque no acertaron en el estilismo general. Mujeres que
en otros actos o eventos han sido iconos de elegancia, se equivocaron de pleno.
Entiendo que un hecho histórico como este impresione, y que la primera pregunta
que te hagas cuando recibes la invitación es ¿ y que me pongo por DIor ? Imagino horas
de estrés, búsqueda, pruebas, consejos de las amigas, consultas a tu madre…
vamos, que te adelgazas diez kilos en cinco días del agobio.
Al final pasa, que tan bien quieres lucir que lo único que
consigues es equivocarte.
Comenzamos con Isabel Preyler, normalmente está
maravillosa, pero en esta ocasión fallo totalmente. Los brazos descubiertos al igual que
Esther Koplowitz. cuando ya no puedes lucirlos, es una apuesta demasiado arriesgada.
Un error que cometieron numerosas invitadas, incluidas algunas mallorquinas.
Otro de los grandes fallos fue la pareja formada por David
Bisbal y su acompañante. Él, sin corbata y ella, con sandalias de tacón de
madera, mas propias de una barbacoa que de un acto solemne.
La mujeres del partido popular eligieron en su mayoría
abrigos de verano de corte trapecio, imagino que con el objeto de disimular
los kilitos de mas. Resultado? Se ven
mayores, y en absoluto consiguen disimular aquello que no les gusta. Las únicas que para mi se
salvan, son Ana Pastor de gris claro e Isabel Garcia Ministra de Agricultura
con un vestido amarillo intenso, sobrio y elegante.
Sorprendió Carla Royo Villanova vesida de Del Pozo, uno de
lo diseñadores que le he sugerido a la ya Reina Letizia, lo encontré un poco
exagerado. Aunque en Carla funciona, es muy ella.
En la bancada de las mujeres de la izquierda, la cosa no
cambia mucho. Celia Villalobos con su traje morado y rosa estaba fuera de
lugar. La andaluza Susana Díaz de naranja, no estaba fuera de lugar, pero
tampoco era el traje ideal para su figura.
En resumen, las invitadas querían verse impresionantes, hoy
era un acontecimiento para la historia y las imágenes las verán generaciones
futuras. Mi consejo: ante la duda, no olvidar que el menos es más.
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