White es la noche Nikki

La princesa está triste, ¿que tendrá la princesa?  ¿será acaso que ha perdido su corona? Nos despertamos con el notición que se produjo en mitad de la noche, con alevosía y ventaja y casi de escondidas. Decisión dura la del rey  Felipe VI, que ha borrado de un plumazo el Ducado de Palma del curriculum de su hermana y cuñado. Me pregunto que será ahora de las cenas navideñas o reuniones familiares, imagino que siempre habrá un mensaje subliminal, un “y tú más” en cada comunión, bautizo o boda. Cosas de familia.

Pero mis queridos EstiFans, hoy no quiero agobiaros con problemas familiares, hoy os quiero guiar por el camino de los sueños, la fantasía, la ilusión, el glamour, la ostentación, por ese camino en el que todo es de colores radiantes y hermosos, donde no hay espacio para nada que no sea el goce y disfrute.

Es temporada de fiestas, casi ha dado comienzo el verano, y para dar el pistoletazo de salida nada mejor que asistir a la tradicional White Party de Nikki Beach Mallorca, en su cuarta edición sin duda los organizadores se han superado.

Para los que no hayan asistido a una fiesta en NIkki, os cuento, además de que es condición obligada acudir de blanco – por supuesto- la recepción es impresionante, cuando llegas al edificio que alberga el beach club ya comienza la fiesta, ayudantes, seguridad, personal, todos llevan puesta una inmensa sonrisa de bienvenida, eso ya te pone automáticamente de buen humor .

Una vez has traspasado la puerta principal te encuentras con la decoración, que este año fue sencilla pero no por ello menos espectacular, tiras largas de color blanco daban la bienvenida a los invitados. El viento las mecía cálidamente, y parecían abrazarnos para introducirnos en una suave espuma de mar. Envueltos por ellas recorrimos el pasillo, no sin antes recibir la calurosa bienvenida del personal de Nikki que aplaude a la entrada de los invitados. Cuál viaje en el espacio repentinamente te sientes transportado a otro mundo. Todo lo que rodea el entorno habla de lujo, de diversión, de glamour. Hombres y mujeres vestidos con sus mejores galas destacan ya el bronceado. La música y la terraza son el lugar perfecto para celebrar en buena compañía.

Tengo que decir que aunque la mayoría de asistentes acertaron con su estilismo, en ocasiones no todo el mundo elije el correcto, os dejo algunas imágenes de looks que a mi entender dejan bastante que desear.

Y en cuanto al espectáculo, solo Nikki sabe hacerlo, desde el minuto cero  la música no para, el ballet sale una y otra vez para conseguir que el espectador disfrute de una noche fabulosa.

El menú a base de platos sencillos, era delicioso, la mezcla de sabores muy equilibrada en cada uno de ellos; por cierto, recomendamos la hamburguesa que a todos gustó y que más de alguno preguntó si se cocinaba en versión grande. Fue la anécdota de la noche.

Para el cierre, nada mejor que hacer que corra el champagne, bailar hasta que el cuerpo aguante y de fondo una velada espléndida típica del mediterráneo. Esto, esto es una noche Nikki señores.